Para la Rural, esa actividad aportará el 39% de los 58.000 millones de dólares que inyectará el agro en la economía.
La ganadería liderará este año la inversión del campo, con un aporte de US$ 22.500 millones, por encima de la contribución que hará la agricultura. Esto se debe al proceso de recuperación que lleva adelante la producción y que impactará en el resto de la cadena.
Según un informe del Instituto de Estudios Económicos y Negociaciones Internacionales de la Sociedad Rural Argentina (SRA), todas las actividades del agro inyectarán este año a la económica, entre inversión y gasto, 58.000 millones de dólares. De ese monto, la ganadería contribuiría con US$ 22.500 millones o el 39% del total.
«El productor destinará 13.765 millones de dólares a la reposición de hacienda. Se espera un aumento de la participación en la faena de novillos pesados para exportación, con el beneficio que la mayor cantidad de kilos por cabeza a su vez generará más cantidad de carne para el mercado interno», indica el trabajo.
Desde hace un tiempo hay en la actividad un proceso de retención de vientres para aumentar el stock ganadero. El ganadero se queda con las hembras para producir más terneros.
Vale recordar que con el kirchnerismo se perdieron 10 millones de cabezas del rodeo, por las intervenciones en el mercado y las trabas para exportador que llevaron a una liquidación de hacienda. Ese proceso se agravó en medio de una intensa sequía en 2008/2009. Así se cayó para fines de 2010 a 48,3 millones de cabezas. Hoy el rodeo bovino ya está en 52,6 millones, mostrando una recuperación de casi el 10% respecto de la caída que tuvo.
«Este sector invertirá también 3446 millones de dólares en gastos directos, principalmente suplementación, confección de pasturas y sanidad , entre otros. Además, inyectará 2576 millones de dólares en gastos indirectos, principalmente en estructura y financiamiento. Por último, el sector ganadero adquirirá bienes de uso durable por 1075 millones de dólares», detalla la Rural sobre la ganadería.
«Esta expectativa estimula a una mayor demanda de semillas forrajeras. Se espera que esta tendencia se afirme para la siembra de primavera, sumando la conformación de reservas, la renovación de alambrados, molinos y aguadas entre otros insumos necesarios para mejorar la productividad», añade.
El rubro que seguirá en la inversión del campo será la agricultura, con US$ 21.000 millones o 36% del total.
Para ello, se prevé que la siembra se expandirá 2,5 millones de hectáreas. En este contexto, se espera un millón de hectáreas más con trigo, otro millón de hectáreas extras con maíz y 450.000 adicionales con girasol. En esos tres cultivos bajaron a cero las retenciones, lo que hizo que mejoraran los ingresos de los productores en medio de un repunte de precios.
«Se sembrará un total que superaría las 34 millones de hectáreas, con una producción de más de 110 millones de toneladas. De esta manera, transportar la cosecha de este año generará cinco millones de viajes de camión, 500.000 más que el año pasado y que podrán alcanzar a seis millones el año que viene», precisa el estudio.
En la Rural están convencidos que la rebaja de las retenciones al sector y la quita de las trabas para exportar, medidas que tomó el Gobierno apenas asumió, fueron clave para incentivar las inversiones este año. En la entidad destacan que el 80% de la inversión del agro se gasta en los pueblos. «La reactivación es evidente: el 80% de ese dinero se gasta y se invierte en los pueblos donde se produce o sea en cada rincón de cada provincia», remarca.
El trabajo también explica que el Estado percibirá por retenciones a la soja de la campaña actual (el grano continúa con 30% de alícuota) 7155 millones de dólares.
Ya hay un clima de reactivación que se observa en diversos indicadores. Las ventas de fertilizantes crecieron un 25% durante el primer cuatrimestre, las de sembradoras lo hicieron 28% en el primer trimestre y las de implementos agrícolas en general lo hicieron 9%. En la industria automotriz también se siente el repunte del agro con una demanda de camionetas que subió 25% en el año.
Sin embargo, no todos los sectores del agro se subieron al tren. Los productores tamberos afrontan una fuerte pérdida de rentabilidad, en medio de un aumento de costos, y los productores de porcinos, además del incremento de insumos clave y la caída de ingresos, protestan por la importación desde Brasil de carne de cerdo. Respecto de este último tema, la Federación Agraria Argentina (FAA) se movilizará el miércoles en el acceso del puente Rosario-Victoria.
La Rural ve una recuperación incipiente en otros sectores que estaban afectados. «Los cultivos plurianuales, si bien han tenido fuertes pérdidas a causa de condiciones climáticas adversas, como en el caso de la vitivinicultura, las manzanas, el azúcar y el tabaco, entre otros, comienzan a ver una reacción positiva a partir de los cambio en los precios relativos. «En esta línea, en el caso de las exportaciones desde los puertos al sur de Bahía Blanca, durante los primeros cinco meses del año, los embarques de peras frescas aumentaron un 9% y los de jugos de frutas concentrados un 33%», concluyó.
El optimismo de la Rural por el futuro del sector se refleja en otro dato. Cree que en los próximos cinco años la actividad puede crear 1,3 millones de empleos nuevos, directos e indirectos.
Fernando Bertello