Para poder lograr un planteo eficiente y alcanzar los objetivos de engorde es fundamental una correcta planificación. El Ingeniero Daniel Mendez detalló puntos claves a tener en cuenta para garantizar el éxito.
Los planteos de recría o de invernada, a pesar de haber sido intensificadas en los últimos tiempos, siguen manteniendo una base pastoril bastante importante. Desde el punto de vista de su utilización estos sistemas se han intensificado por aumentos de la carga pero muchas veces han sido acompañadas por los aumentos de peso necesarios para lograr procesos de invernada en el término de un año (objetivo de invernada).
Al respecto hay determinadas épocas del año donde los niveles de ganancia de peso no son los adecuados por lo tanto la parición en corrales ha subsanado varias de estas falencias en lo que hace al manejo de pasto.
El Ing. Agr. Daniel Mendez detalló una serie de condiciones fundamentales para lograr el éxito en la recría. Una de las medidas que nos permite a nosotros relacionar el requerimiento del animal con el aporte de forraje que hace hoy la pastura o el verdeo está dada por la asignación forrajera. “Esta herramienta mide la disponibilidad de materia seca que debe tener el animal para garantizar determinado ritmo de ganancia diaria de peso”, explicó el especialista.
Existen evidencias experimentales que indican que asignaciones forrajeras del 3% o superiores son las aconsejables para mantener alto ritmo de engorde garantizando no más de 700 gr por animal por día, “si bien las GDP (ganancia diaria de peso) no son máximas son las que permiten compatibilizar las necesidades en planteos exigentes como son las invernadas cortas” aclaró Daniel.
Suplementación
En este tipo de planteos también puede entrar la suplementación, porque es muy complicado poder garantizar una oferta estable a lo largo de todo el año. La suplementación actual actúa como un balanceador de carga permitiendo atenuar fluctuaciones, para esto cualquier tipo de reservas o los granos son herramientas adecuadas. Lo que hay que tener en cuenta para que la alimentación sea eficiente es la capacidad de sustitución, es decir cada vez que uno suplementa a un animal o a un novillo o a cualquiera de las categorías en un planteo ganadero, el animal deja de consumir algo de forraje. Eso no es una relación 1 a 1 sino que es una relación 60, 70 %, es decir que por cada kg de grano o de silo que le estamos dando al animal deja de consumir un 60, 70% de la dieta base, clarificó el Ingeniero.
Para planteos de alto ritmo de engorde es fundamental tener en cuenta la calidad de la reserva. En términos generales si bien se pueden lograr muy buenas reservas tanto con maíz como con sorgo a nivel de campo se ven mejores resultados con maíz y esto está más que nada definido por el tipo de ambiente en el cual vamos a desarrollar el cultivo.
En lo que hace a reservas secas como son los henos, no hay ningún problema pero hay que tener la precaución en seleccionar las de mejor calidad para las categorías con mayores requerimientos.
El éxito
Para poder lograr un planteo eficiente y lograr el objetivo de engorde de más de 600 gramos de GDP, para cubrir las expectativas de un planteo de engorde de menos de un año de duración, se requiere de una correcta planificación. Ajustar el aporte que va a hacer la distinta cadena pastoril o que podemos elaborar para cada zona, como juega el rol la suplementación y eso compatibilizarlo con los requerimientos de los animales, que dentro de cierto rango en función de los momentos de entradas y de salidas y a los usos de corrales o de reservas los podemos manejar. “De esa compatibilización reside el éxito del planteo ganadero”, concluyó el especialista.
Gisela Aghemo